La diferencia entre crowfounding y crowlending es importante cuando estamos buscando diversas fuentes alternativas de financiación para un proyecto determinado que tengamos entre manos.
El crowdfunding posee un atractivo especial al tratarse de una forma de financiarse no profesional, en que, en lugar de recurrir a bancos, fondos de inversión, business angels, agencias de préstamos, inversores de capital riesgo, y otros profesionales del sector financiero, recurrimos a través de Internet, nuestros contactos y las redes sociales, a personas no profesionales que, sea por altruismo, por interés en ver desarrollado el proyecto, o por otras razones, nos ayudarán con sus contribuciones económicos.
El crowdfunding en franquicias es algo que se halla en boga a día de hoy. Quizá ello suene un tanto desconcertante para muchos, ya que no pocas personas están acostumbradas a oír tan exótico término vinculado a la industria musical o al maltrecho sector audiovisual, no digamos ya cinematográfico. Lo cierto es que nos hallamos en tiempos en que la diversificación de las fuentes de financiación está en pleno auge, sobre todo debido a un factor fundamental, como lo es la combinación de la comunicación y compraventas offline o presencial, con la comunicación y compraventas online, es decir, a través de la web y de sus múltiples vericuetos. Además, no lejos de este concepto se suele encontrar otro más: el crowdlending, que suena todavía más exótico y extraño a muchos.
Como manera de inversión o de financiación, tanto el crowdfunding como el crowdlending son dos conceptos que están a la orden del día cuando buscamos apoyo al comenzar una franquicia. Para empezar con buen pie, es necesario un impulso económico, un espaldarazo financiero inicial: así, habremos de contar con un plan de financiación que tome en consideración las más variopintas fuentes de financiación, desde el crédito bancario y la subvención pública (así como las exenciones fiscales y tributarias y de tarifa de autónomos que se brindan a los primerizos empresariales en España)… hasta llegar al crowdfounding y el crowdlending. Ambos se emplean mucho cuando se está impulsando un negocio y este se halla en sus primeros pasos y su más nebulosa infancia. Y si tanto se emplean, por algo habrá de ser. Tal como reza el refrán castellano, algo tendrá el vino cuando lo bendicen.
En el caso de buscar apoyo económico, las distinciones entre crowdfunding y crowdlending son absolutamente esenciales: debemos saber distinguir estos dos métodos de financiación para poder hacer uso de ellos de manera correcta y tener en cuenta lo que deberemos cumplir para no tener sorpresas a última hora.
¿Qué es el crowdfunding en empresas franquiciadas?
El crowdfunding –también denominado como financiación colectiva o micromecenazgo– es un mecanismo colaborativo de financiación de proyectos. Para conseguirlo, es esencial la publicidad que se dé al proyecto, ya que de ello depende gran parte del éxito de este método de financiación. El proceso comienza con la difusión del proyecto por parte del emprendedor para encontrar prestamistas independientes que aporten lo que crean necesario para conseguir llevar a cabo el negocio, generalmente eligiendo entre opciones de participación que el emprendedor haya propuesto, obteniendo un beneficio según la aportación, o no, y siempre en caso de que el negocio tenga éxito.
En España, recibe legalmente el nombre de plataformas de financiación participativa, y tiene su origen en las donaciones. El crowdfunding en franquicias ha de tirar necesariamente de una febril actividad en Internet y redes sociales, donde también se desarrollan las campañas de publicidad y marketing en la web, tales como las de posicionamiento SEO y campañas intensivas SEM (por ejemplo, Google Ads, Facebook Ads, Twitter Ads, Linkedin Ads, etc) puedan ser altamente útiles para la recaudación de fondos con que despegar nuestro anhelado proyecto. La diferencia entre crowfounding y crowlending estriba sobre todo en la especialidad de la forma de financiación. No es en absoluto una idea descabellada contar con el micromecenazgo. Infinidad de productos audiovisuales, obras artísticas costosas, y otros proyectos no poco arriesgados se han financiado así. Por lo tanto, algo cuyos beneficios pueden resultar mucho más pragmáticos y palpables, como es una franquicia, no podía permanecer ajeno a ello. Y no el algo tan nuevo el asunto del crowdfunding de empresas franquiciadas. Ya ha demostrado su eficacia en más de una ocasión: tal es el caso de Infinit Fitness, por poner un ejemplo contundente y significativo.
En líneas generales, podemos diferenciar entre cuatro tipos de plataformas de crowdfunding:
- Recompensa: a cambio de tu colaboración en este micromecenazgo con cantidades de dinero pequeñas o relativamente modestas, los impulsores del proyecto te premian con entradas para el estreno de la película o para el concierto, copias del disco que se va a grabar, camisetas, llaveros y merchandising diverso, etc. Según algunos estudios (como el del Observatorio de Divulgación Financiera), en la actualidad esta forma de micromecenazgo representa nada menos que un 29% del total.
- Donativos: Representa actualmente otro 29% del total, y se emplea para campañas benéficas y ONGs. En la última década, concretamente desde 2013, ha ido conociendo un incremento espectacular, siendo a día de hoy un pilar incuestionable de la ayuda humanitaria y las campañas de ayuda social.
- Crowdequity: se trata de ofrecer inversiones directas en el capital de la empresa que esté desarrollando el proyecto. Se centra mucho en campañas especializadas en los profesionales del sector que esté llevando a cabo la campaña en cuestión.
- Crowdlending: se diferencia propiamente del término más general de crowdfunding, y es por ello que hablamos de esta modalidad con más detalle abajo, para así poder comprender mejor las distinciones entre crowdfunding y crowdlending.
¿Qué es el crowdlending?
En cuanto al crowdlending, también es un mecanismo colaborativo de financiación de proyectos, que comienza siempre y cuando los inversores estén tan interesados como para participar, por eso también tiene como base una buena difusión publicitaria.
Al leer esta descripción podemos pensar que es lo mismo que el crowdfunding, pero no son exactamente lo mismo. Cuando utilizamos crowdlending como método de financiación nos prestan pequeñas cantidades de dinero a cambio de un retorno financiero que está previamente estipulado en un contrato de préstamo, es decir, pagamos unos intereses fijos pactados.
¿En qué se diferencian el crowdfunding y el crowdlending?
Para poder ver las diferencias entre ambos métodos de financiación, a continuación te iremos enumerando para poder entenderlas más claramente:
- Si vemos la diferencia basada en el riesgo, dejando claro que cualquier tipo de inversión es un riesgo, el crowdfunding tiene más riesgo en caso de que queramos recuperar nuestro dinero, ya que esto sólo ocurrirá si el negocio tiene éxito, y siempre y cuando no haya sido un aporte sin interés de recuperación. En cambio, en el crowdlending el inversor recibe mensualmente –o en el periodo de tiempo que se haya estipulado a la hora de realizar la inversión– su dinero, al margen de los posibles beneficios que pueda percibir si el negocio tiene éxito.
- En cuanto a obtener beneficio de la inversión, ambas opciones pueden ser válidas, siempre que el negocio tenga éxito. De todos modos, el beneficio que se obtenga dependerá de las condiciones que se hayan aceptado en el momento de la financiación, sobre todo en el crowdlending, ya que generalmente el crowdfunding no observa una devolución del dinero invertido y sólo obtendrá beneficios cuando el negocio tenga éxito y siempre y cuando el dueño del negocio así lo haya ofrecido.
- En cuanto al seguimiento y la información continua de la inversión, es más habitual en el crowdlending, ya que al recibir su inversión paulatinamente tendrá información acerca del proyecto; mientras que en el crowdfunding la información puede ser mucho más extensa en el tiempo.
- Por estas razones, el crowdfunding depende mucho de la confianza que tengamos en el proyecto y de si seguir nuestro instinto o no; y de cara al emprendedor, será una opción muy rentable en caso de que el negocio no tenga éxito. El crowdlending dará más garantías al inversor de recuperar su dinero al ser un modo más seguro, por lo que será más sencillo conseguir inversores ofreciendo este método.
- Tener un plan de negocio sólido y atractivo será la clave del éxito para conseguir inversores, busquemos el método de financiación que busquemos. Por esta razón, la preparación previa a la presentación del proyecto será clave en ambos métodos de financiación para presentar un plan sólido que sea capaz de atraer a los inversores adecuados.
El crowdfunding en franquicias, al igual que el crowdfunding, puede ser una gran ayuda y la opción que debas considerar para impulsar tu negocio. La diferencia entre crowfounding y crowlending es algo que nos ayudará a planificar nuestra campaña en función de nuestras necesidades y exigencias.